La trata de personas es un delito penal que implica la captación, el transporte, el traslado, la recepción o la acogida de personas con fines de explotación. La explotación puede incluir trabajo forzado, explotación sexual o extracción de órganos.
El delito de trata de personas conlleva penas significativas en Canadá, que incluyen prisión de hasta cadena perpetua y multas. Las penas pueden ser incluso mayores si la víctima es menor de 18 años o si el delito se comete en asociación con una organización criminal.